¿El ERTE consume paro? Todo lo que debes saber

El ERTE es una herramienta clave en momentos de crisis. Aunque su principal objetivo es preservar la relación laboral mientras la empresa atraviesa dificultades temporales, es importante entender cómo el ERTE consume paro y cómo esto puede afectar a tu prestación por desempleo. En este artículo, aclararemos esta cuestión de acuerdo con la legislación española vigente.

¿El ERTE consume paro? 

Para empezar, es importante aclarar que el ERTE es un mecanismo que permite a las empresas suspender temporalmente los contratos de trabajo o reducir la jornada laboral de sus empleados en situaciones de crisis económica o eventos imprevistos, como desastres naturales o pandemias. 

En cuanto a la pregunta acerca de si el ERTE consume paro, la respuesta definitiva es sí.  Pero ¿de dónde surge esta duda?

Pues bien, este recurso fue ampliamente utilizado durante la pandemia de COVID-19. Apenas 48 horas después de declararse el Estado de Alarma, el Gobierno aprobó el Real Decreto-Ley 8/2020, permitiendo la activación de los ERTE para que las empresas pudieran suspender su actividad sin recurrir a despidos masivos.

En un principio, los trabajadores acogidos al ERTE COVID pudieron recibir la prestación por desempleo sin que esto afectará a sus días acumulados. Sin embargo, este beneficio se limitó hasta el 30 de septiembre de 2020. Debido a esto, muchos trabajadores quedaron sumidos en un mar de dudas, ya que si el ERTE COVID consume paro esto impacta directamente sus derechos a la prestación por desempleo a largo plazo.

ERTE ETOP y ERTE por fuerza mayor: ¿Todos los ERTES consumen paro?

Existen dos tipos principales de ERTE según su causa, y es esencial comprender cómo cada uno afecta a tus derechos laborales:

• ERTE ETOP: Este tipo de ERTE se aplica cuando una empresa enfrenta dificultades económicas, técnicas, organizativas o productivas. El ERTE ETOP consume paro, por tanto, los días de prestación se reducen de manera proporcional al tiempo que dure la suspensión o reducción de jornada.
• ERTE por fuerza mayor: Este tipo de ERTE se utiliza en situaciones imprevistas, como desastres o pandemias. También el ERTE por fuerza mayor consume paro, lo que afecta los días de prestación acumulados.

Es crucial tener en cuenta que efectivamente todos los ERTE consumen paro de manera similar desde que se dio por finalizada la exención otorgada por el gobierno. Dicho de otra forma, el ERTE consume paro a partir del 1 de octubre, lo que significa que los días bajo este régimen se restan de los días acumulados de prestación, igual que en una situación de desempleo convencional y esto puede tener un impacto significativo en la cantidad de días de prestación disponibles para los trabajadores.

¿De qué manera el ERTE consume paro y qué implica para los trabajadores?

Dependiendo del tipo de ERTE, el consumo de paro se contabiliza en días o en horas. En los casos en que el ERTE implica la suspensión total del contrato, afectando todos los días de la semana, cada día de prestación equivale a un día de paro consumido.

Por otro lado, si la suspensión del contrato se aplica solo a ciertos días laborables del mes, esos días se multiplican por 1,25. Esto significa que, por cada día en ERTE, se consumen 1,25 días de paro. En el caso de los ERTE de reducción de jornada, el consumo de la prestación se calcula en horas en lugar de días.

El mayor impacto que tiene el hecho de que el ERTE consume paro, es que si después de finalizar el ERTE somos despedidos o no se renueva nuestro contrato, tendremos a nuestra disposición menos días para recibir la prestación por desempleo.

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