¿Te urge conseguir un dinerito extra para acabar el mes y te estás quebrando los dedos pensando en cómo resolver? Probablemente te convenga pedir un préstamo para salir del tropezón que te está agobiando tanto. Y no es que se trate de una gran cantidad de dinero la que requieres, sino simplemente un empujoncito para poder terminar el mes.
Para suerte tuya y de muchos en tus mismas condiciones, en España existe una gran cantidad de entidades prestamistas que ofrecen minicréditos los cuales son fáciles y rápidos de obtener.
Pero antes de seguir adelante hay muchas cosas que debes saber sobre préstamos y minicréditos.
Empecemos por decirte qué es un minicrédito
Un minicrédito es un servicio ofrecido por entidades crediticias por medio del cual puedes acceder al préstamo de una cantidad módica de dinero. Los montos a préstamo que manejan los minicréditos van normalmente de los 100 a los 600 euros y precisamente se ofrecen estos importes ya que son más fáciles de pagar y realmente resuelven las dificultades del día a día, como la reparación de la nevera, completar la matrícula, pagar la factura de los servicios de internet, en fin, la lista sería interminable.
Los minicréditos están pensados precisamente para ayudar a personas como tu que atraviesan por rachitas de estrechez financiera y que necesitan una manita para seguir adelante. Este tipo de préstamos fue diseñado para devolverse rápidamente en un solo pago junto con los intereses que le apliquen. Cuando los solicitas, tú mismo indicas la cantidad y el plazo de devolución. Esto es, tu puedes pedir un préstamo de 300 euros a pagar en 10 días. Una vez que tu solicitud es evaluada y aprobada, conoces cuánto te va a costar el préstamo, es decir, cual es el total de intereses a pagar cuando devuelvas el préstamo.
¿Qué son los minicréditos nuevos?
Seguro ya has escuchado este término. Pues verás, el mercado de los préstamos personales rápidos en España está en constante crecimiento y debido a ello, siempre está presentando ofertas nuevas de préstamos y por lo tanto nuevas oportunidades de financiación. Además, constantemente surgen nuevas entidades prestamistas.
Un minicrédito nuevo se refiere al que es ofrecido por una nueva entidad financiera o porque el prestamista ofrece condiciones especiales por tiempo limitado.
Un ejemplo de estos son los minicréditos que te otorgan un préstamo gratis. Esta es una estrategia que a menudo utilizan las empresas prestamistas debutantes. Con esto buscan ganar popularidad en un mercado crediticio por demás competido, y por supuesto, los usuarios de los préstamos personales se benefician de las ofertas que ofrecen los minicréditos nuevos.
¿Qué son los préstamos gratis?
Por lo general, un préstamo gratis te lo puede ofrecer una entidad prestamista la primera vez que le pides un préstamo. Pero no te confundas, gratis no quiere decir que te vayan a regalar el dinero, gratis quiere decir que no vas a tener ningún costo asociado al préstamo, como intereses u honorarios, Sin embargo, al terminar el plazo convenido, deberás pagar completa la cantidad que te prestaron.
Este tipo de minicréditos nuevos son una gran ayuda en tiempos de estrechez económica porque al devolver el préstamo pagarás sólo la cantidad que te han prestado, ni un céntimo más.
¿En donde se puede conseguir un minicrédito nuevo?
Hoy en día las entidades prestamistas trabajan por medio de un portal de internet. Ahí, tu llenas la solicitud, indicas la cantidad a préstamo que deseas y cuándo la puedes pagar (todo esto dentro del rango dado por los prestamistas). Envías la solicitud y en cuestión de minutos te resuelven tu minicrédito. Si es favorable su respuesta, en menos de una hora te estarán ingresando en cuenta tu préstamo.
De principio a fin, todo el trámite es online. No se te piden documentos, no tuviste que hacer una larga cola, ni esperar horas como sucede cuando acudes a un banco. Realmente, el modo de operar de las entidades prestamistas es muy sencilla y rápida. Lo único que necesitas es un ordenador, tablet o móvil y puedes tramitar tu minicrédito cualquier día de la semana a cualquier hora.
Puedes hacer una búsqueda online de las frases ‘minicrédito nuevo’, minicrédito’, ‘préstamo personal’, por mencionar algunas, y enseguida verás una gran cantidad de resultados. Muchos de estos resultados son de entidades prestamistas y otras más, son de buscadores de préstamos, los cuales son sitios web que te permiten consultar muchos préstamos al mismo tiempo, llenando una única solicitud. Esto te ahorra mucho tiempo al momento de buscar el minicrédito que mejor te convenga.
¿Qué requisitos se deben cumplir para obtener un minicrédito nuevo?
Cualquier persona que sea mayor de edad con un DNI válido que sea residente español puede solicitar un minicrédito, además debe tener una cuenta bancaria propia en un banco español y un móvil con número propio.
Estos requisitos serían los mínimos que cualquier entidad prestamista solicita, sin embargo depende de cada una solicitar algo más.
¿Qué hay de la nómina? ¿Es indispensable para pedir un minicrédito nuevo?
Realmente no. Una nómina no es requisito indispensable para solicitar un minicrédito nuevo o para cualquier otro tipo de minicrédito. Lo que si te van a solicitar es que tengas un ingreso, sea el que sea.
Si eres autónomo, no tienes nómina pero sí ingresos de tu actividad como autónomo. Si eres ama de casa, seguramente mes a mes cuentas con una pensión alimentaria; si eres estudiante, probablemente tengas una beca o subvención; si eres pensionado, estás recibiendo una pensión; si eres parado, seguramente estás recibiendo un subsidio económico. Cualquiera de estos ejemplos está considerado como un ingreso.
Esta es una gran noticia, ya que permite que un gran número de personas que no reciben una nómina y que hoy por hoy, no son sujetos de crédito para la banca tradicional, puedan acceder a un minicrédito con una entidad prestamista.
¿Qué tan bueno es endeudarse?
Si bien es cierto que nadie quiere vivir endeudado, la realidad es que la gran mayoría de las personas en un momento dado contrae deudas. Puedes estar endeudado con una tarjeta de crédito con la que decidiste ‘financiarte’ algo que necesitabas debido a que esa era la única forma de poderte hacer de ese bien. Una tarjeta de crédito bien manejada, es un gran método de financiamiento, sobretodo cuando compras a meses sin intereses o cuando pagas mes a mes todo tu saldo para no pagar intereses. Cuando no es así, tu deuda la irás pagando mes a mes con una tasa de interés relativamente alta. Para este tipo de financiación, en algún momento dado el banco que te otorgó la tarjeta de crédito estudió tu solvencia y capacidad de pago. Debes tomar en cuenta que uses o no tu tarjeta de crédito, pagues todo lo que debas en cada estado de cuenta o vayas pagando en mensualidades, todas las tarjetas de crédito te cobran una ‘anualidad’ que es el costo por tener abierta una línea de crédito.
Puedes endeudarte pidiendo una hipoteca para comprar una casa. Aunque en el mundo sí existe quien cuenta con los recursos para comprar toda una casa o un piso de un solo pago, la realidad es que la gran mayoría de los mortales necesitamos de la financiación de una hipoteca para hacernos de un lugar en dónde vivir. Normalmente las hipotecas son un préstamo a muy lago plazo (10 a 20 años o más) con una tasa de interés bastante baja.
Lo mismo sucede con los créditos automotrices. Cuando tu contratas uno de estos créditos es por que esa era la única manera de poder comprar un coche. Eso está bien. Contraes una deuda a unos 2 a 5 años, con una tasa de interés relativamente baja y la vas pagando poco a poco.
Estos tipos de préstamos requirieron de muchos requisitos, muchos documentos y un estudio de solvencia bastante exhaustivo, pero de alguna manera, el banco que te otorga el crédito, tiene como garantía tu casa o tu auto.
Viendo estos ejemplos, realmente no es tan malo endeudarse si al terminar de pagar tu ‘deuda’ te pudiste hacer de un bien. Sin embargo, el problema de las deudas se da cuando no puedes cumplir con el pago mensual. Cuando se trata de un bien raíz o un auto, en el peor de los casos, si de plano no puedes pagar, puedes vender ese bien traspasando esa deuda a otra persona y recibir un pago a cambio de lo que pretendiste comprar, y aunque te quedas sin el bien, te quitas de encima la deuda.
Sin embargo, cuando se trata de las tarjetas de crédito no hay algo así como la venta de tu deuda. Con las tarjetas de crédito es muy fácil comprar y comprar, siempre y cuando tu límite de crédito te lo permita, comenzando a acumular una deuda con la que fácilmente puedes llegar a deber cantidades mayores a tu capacidad de pago. Cuando eso sucede comenzarás a pagar intereses sobre las cantidades que no puedas pagar y aumentarás tu deuda a niveles tales que puedes llegar a deber mucho más de lo que originalmente compraste.
¿Se recomienda pedir préstamos personales con los minicréditos?
La deuda de un préstamo personal, por lo general obedece a una falta de liquidez, un atorón económico o un contratiempo para el que no estabas preparado y debido a esto, no estás adquiriendo ningún bien con el préstamo, sino solucionando un problema. Esto no es una regla. Puede haber ocasiones en las que necesites o quieras adquirir algo pero no cuentas aún con los fondos y no quieres dejar de pasar la oportunidad y por esto estás pidiendo el préstamo. En este caso es más recomendable, ahorrar para poder juntar esa cantidad y comprar lo que deseas que pagar intereses sobre algo que no es vital.
Es necesario que estés consciente de que los préstamos presonales, aunque son relativamente fáciles y rápidos de obtener, son caros, pero cuentan con la ventaja de que no necesitas presentar ninguna garantía. Es más, ni siquiera te van a preguntar para qué necesitas el dinero.
Un préstamo personal solicitado para aliviar un bache financiero momentáneo puede ser en un momento dado, una buena oportunidad por que te permite de alguna manera salir adelante, pero como se tiene que pagar en el muy corto plazo, debes estar preparado para tener el dinero para poderlo pagar. Si pides un minicrédito es porque tienes la certeza de que vas a poder pagarlo en el plazo que tú mismo indiques. Si de antemano sabes que no vas a poder pagar a tiempo, mejor no lo pidas, te estarías acarreando más problemas de los que ahora tienes.
Cuando tu pagas en tiempo y forma tu préstamo, la entidad prestamista estará encantada de la vida contigo y te ofrecerá una cantidad mayor y un plazo de devolución más largo en tu próximo préstamo. Sin embargo, NO es aconsejable estar pidiendo este tipo de préstamos de forma recurrente ya que los intereses son altos. Si constantemente necesitas un préstamo, es mejor que pienses en otro tipo de financiación, que te ofrezca un préstamo de un monto superior a pagar en un plazo más largo con una tasa de interés menor.
Son tantas las entidades prestamistas que existen en España que muchas de ellas han reducido significativamente sus tasas de interés, tarifas, comisiones y otros costos asociados a la obtención de un préstamo, con el fin de atraer más clientes. Sin embargo las tasas de interés para los prestamos personales a través de los minicréditos siguen siendo altas.
Pide un minicrédito cuando realmente esta sea tu única opción y tengas la certeza de poderlo pagar a tiempo.
¿Por qué son altos los intereses de un minicrédito?
Los intereses que se le aplican a los préstamos de un minicrédito son altos porque las entidades prestamistas prestan el dinero prácticamente ‘a ciegas’ y con estas tasas de interés cubren el riesgo de los impagos.
Y decimos ‘a ciegas’ porque los requisitos que piden para otorgarte el minicrédito son mínimos, sin garantía, sin nómina e incluso, hay quienes te prestan aún y cuando estás en la ASNEF.