¿Qué es el riesgo financiero y qué tipos existen?

El riesgo financiero es un concepto fundamental en el mundo de las finanzas. Para muchas personas puede sonar extraño, pero es un aspecto que conviene entender, sobre todo si tienes en mente invertir tus ahorros o simplemente deseas tener conceptos económicos básicos. En este artículo explicamos los aspectos principales del riesgo financiero y sus tipos.

¿Qué es el riesgo financiero?

El riesgo financiero hace referencia a la posibilidad de sufrir pérdidas a causa de cambios imprevistos en el valor de los activos financieros. Es un elemento inherente a cualquier actividad económica e inversión. El riesgo financiero está asociado a muchos factores, como las fluctuaciones de precios de las materias primas, la oscilación de los tipos de cambio o la variación de los tipos de interés.

Análisis de riesgo financiero

El análisis de riesgo financiero es un proceso que sirve para valorar y gestionar el riesgo financiero. Las empresas y los inversores intentan entender qué riesgo financiero pueden acarrear sus operaciones o su cartera de inversión. Este análisis implica identificar los tipos de riesgo, la probabilidad de que se produzcan y las consecuencias para la organización o el inversor.

Tipos de riesgo financiero

Existen varios tipos de riesgo financiero, pero hay dos que destacan especialmente:

1. Riesgo de inversión: riesgo asociado a la inversión y el comercio, a menudo derivado de la fluctuación de precios de los activos o las mercancías. Incluye el riesgo de mercado, el riesgo de liquidez y el riesgo crediticio.
2. Riesgo de mercado: está asociado al precio variable de los activos, p. ej. en el mercado de criptomonedas. Los inversores deben tener en cuenta la variabilidad de los precios y crear estrategias de reacción a estos cambios. Puedes ser directo (por ejemplo, disminución del precio del activo comprado) o indirecto (por ejemplo, influencia de los tipos de cambio en las acciones).
3. Riesgo de liquidez: se da en situaciones en las que los inversores no pueden comprar o vender rápidamente los activos sin influir en su precio. La liquidez del mercado es importante. La falta de liquidez puede desembocar en una depreciación de los activos.
4. Riesgo crediticio: es el riesgo de insolvencia de un cliente o deudor, lo que puede generar pérdidas de dinero. Se produce cuando el deudor no salda sus obligaciones.
5. Riesgo operativo: hace referencia a las pérdidas económicas causadas por averías de procesos internos, como errores humanos o actividades deshonestas. Puede deberse a actividades internas o acontecimientos externos, como desastres naturales.
6. Riesgo de conformidad: está asociado al incumplimiento de las normativas vigentes de un país o sector. Las empresas deben cumplir con las regulaciones. De lo contrario, podrían producirse sanciones económicas o el cierre de la empresa.
7. Riesgo sistemático: es el riesgo de que un acontecimiento determinado influya negativamente en todo el mercado o sector. Un ejemplo es la bancarrota de Lehman Brothers en 2008, que generó una crisis financiera global. 

¿Cómo gestionar el riesgo financiero?

Para gestionar el riesgo financiero con eficacia, hay que tener un enfoque sistemático. Estas son algunas de las medidas que puedes tomar:

• Diversificar la cartera de inversión: repartir las inversiones en distintas clases de activos puede ayudar a reducir el riesgo.
• Determinar límites de riesgo: definir cuánto estás dispuesto a perder en una inversión puede ayudarte a evitar el riesgo excesivo.
• Usar instrumentos de protección: como opciones o contratos de futuro, que ayuden a minimizar el riesgo de fluctuaciones de precios desfavorables.

El préstamo como rescate

Cuando el riesgo financiero se convierte en una realidad, existe la opción de solicitar un préstamo o crédito. Merece la pena recurrir a esta opción para gestionar las necesidades económicas repentinas o compensar las pérdidas. Antes de solicitar un préstamo o crédito, recomendamos analizar minuciosamente los costes y las condiciones para evitar más problemas económicos en el futuro.

Resumiendo, el riesgo financiero es un elemento inherente del mundo de los negocios y las inversiones. Conviene entender su definición y sus tipos, así como gestionarlo con sensatez. Analizar y entender el riesgo financiero es clave para alcanzar el éxito económico y evitar sorpresas desagradables.